La Catedral Primada

Es visita obligada acercarse al mayor edificio cristiano de la ciudad. La Catedral de Santa María de Toledo, también llamada la Catedral Primada de España posee tantos encantos como secretos, rincones y curiosidades. Al igual que Troya sobre sus propias ruinas, el monumento se levanta sobre el anterior templo visigodo y a su vez la mayor mezquita de Toledo. El edifico es el más grande levantado en la península ibérica durante todo el siglo XIII, y por ende, un lugar clave para entender el gótico español. La Primada alberga en su interior multitud de joyas históricas. Para empezar, la mayor colección de vidrieras medievales, con nada menos que 750, creadas a lo largo de los siglos XVI y XVI. La sacristía ofrece también una colección con obras de Goya, Velazquez, Van Eiyk, Tiziano y, como no podía ser de otra forma, El Greco. Una pinacoteca sin nada que envidiar a las más importantes de España. A no ser que sea domingo a partir de las cinco de la tarde, la entrada completa cuesta 11 euros, dinero que se destina al mantenimiento de la catedral y sus museos. La entrada permite el acceso al Templo Primado, museos, claustro y la Torre de las Campanas. Abierta en 2011 tras 28 años cerrada al público, esta torre está presidida por la “Campana Gorda”, una campana con un tamaño mastodóntico y un pasado de luces y sombras. Tanto la torre como la campana han sido cuidadosamente rehabilitadas y son ahora motivo de orgullo para los toledanos. La Primada tiene tanto valor por dentro como por fuera. Desde la Plaza del Ayuntamiento, la vista de sus puertas es cuando menos impactante, pero el lugar adecuado para apreciar su majestuosidad está en el Mirador del Valle, al otro lado del río Tajo. Una última curiosidad: un reloj con una sola manilla. ¿Dónde está? Que empiece la búsqueda.