La Plaza de Zocodover en Toledo

Es el termómetro de la ciudad. El ágora que marca la vida, el día a día de la ciudad imperial. El mirador perfecto de quienes quieren parar un momento su ritmo alocado de vida y pararse a disfrutar, a sentir y a gozar la urbe de las tres culturas.

Nos estamos refiriendo a la Plaza de Zocodover de Toledo, que hoy por hoy en pleno siglo XXI sigue siendo el centro neurálgico de la metrópolis, un punto de reunión para los habitantes y también para los viajeros y turistas.

Diseñada por Juan de Herrera en los tiempos de Felipe II, se utilizó inicialmente como Plaza Mayor, por lo que en ella tuvieron lugar eventos de todo tipo a lo largo de la historia: desfiles militares, ejecuciones, corridas de toros, espectáculos de teatro, etc.

Su nombre procede del árabe y significa mercado de bestias de carga ya que esta plaza era el lugar donde se reunían los tratantes para hacer sus negocios con sus animales, sobre todo mulas y caballos.

Lamentablemente la cultura cristiana utilizó este área para los autos de fe promovidos por la Santa Inquisición y también para la ejecución de los reos que habían cometido delitos de sangre. Sin embargo la Plaza de Zocodover antigua fue completamente destruida tras un brutal incendio que aconteció  en octubre de 1589. En pleno siglo XVI los toledanos decidieron construir una nueva y espectacular plaza, que es la que actualmente conocemos. Santiago Martín Ruiz fue el encargado de elaborar un llamativo proyecto con una plaza rectangular y porticada. Desde su reconstrucción y rehabilitación se ha convertido en un punto de interés clave dentro del casco histórico de Toledo. Desde ella parten las rutas a pie para ver el Alcázar o la catedral, y por la única arteria abierta al tráfico pasa el Bus Turístico de Toledo, así como el trenecito. Nuestro hotel se encuentra muy cerca de Zocodover. Si buscas habitación, no dudes en consultar las ofertas de nuestra web y obtener el mejor precio garantizado.