Cómo ir de Madrid a Toledo

Muchos de los turistas que visitan Madrid aprovechan parte de su estancia en la capital de España para acercarse a nuestra ciudad. Es una gran decisión: Toledo cuenta con un gran patrimonio artístico e histórico y quedarse en nuestro hotel en su paso por la ciudad da a los viajeros la experiencia de pernoctar en una de las ciudades más bellas de España.

Quien se anime a acercarse a Toledo desde Madrid lo tiene muy fácil. Entre ambas ciudades hay algo menos de 80 kilómetros de distancia y están muy bien comunicadas tanto por carretera como por transporte público. En la mayor parte de los casos, el trayecto entre la capital y nuestra ciudad no durará más de una hora. Si se quiere alojar en el Hotel Carlos V, disponemos de convenio con un aparcamiento público situado a apenas 200 metros del hotel, lo que le permitirá olvidarse del problema del parking en un casco histórico que resulta difícil para moverse.

Lo más fácil es acercarse en coche. Basta con tomar la autovía A-42 y estaremos en Toledo en poco más de 50 minutos. Disponemos, también, de la alternativa de pago de la autopista de peaje AP-41, con un tiempo de viaje muy parecido, pero que nos permite ahorrarnos algunos de los atascos de las zonas de la A-42 más cercanas a Madrid si viajamos en hora punta.

Para quien prefiera venir a Toledo desde Madrid en transporte público, tenemos dos grandes opciones. El tren de alta velocidad es la más rápida. Sale desde la Estación de Atocha y tarda unos 35 minutos en llegar a Toledo. Hay trenes aproximadamente cada hora o cada dos horas -dependiendo del momento del día-. Por su parte, la alternativa del autobús es algo más económica y tiene bastante más frecuencias diarias, pero tarda aproximadamente una hora (si tomamos el autobús directo). Sale del intercambiador de Plaza Elíptica, bien comunicado con el resto de Madrid por metro.

Para quien no haya visitado aún Toledo, es bueno saber que el centro histórico de nuestra ciudad está situado en lo alto de una colina, mientras que las estaciones de tren y autobús están en la parte más baja de la ciudad. Por tanto, hay que subir una buena cuesta para llegar hasta el centro. No obstante, se puede "hacer trampa", ya que en la entrada a la parte histórica más cercana a la estación de tren se ha instalado una escalera mecánica que nos da acceso a un centro cultural... y nos deja también muy cerca de la Plaza de Zocodover, en lo más alto de la ciudad. Foto: David Iliff. Licencia CC-BY-SA 3.0